Aquellas lesiones sospechosas
En consulta dermatológica, es frecuente que los pacientes que han tenido historias cercanas al cáncer de piel, pregunten cómo pueden sospechar de una mancha o un lunar, y cómo pueden saber si amerita esto revisión o no por un especialista.
Aclarar estas dudas y enseñar cómo prevenir o identificar este tipo de cáncer, es absolutamente necesario, pues la clave de esta afección es precisamente la detección y diagnóstico tempranos. Para esto es fundamental que la población esté lo suficientemente educada como para consultar a tiempo, puesto que este es un tipo de cáncer muy común que inclusive puede reincidir en quien ya lo ha padecido.
Algunos cambios en la piel que deben sugerir una consulta a tiempo, son todas aquellas lesiones que aparecen nuevas, que persisten en el tiempo (al menos por más de un mes), y que además cumplen con alguna de las siguientes características:
Son de aspecto brillante o perlado
Sangran con facilidad o con el roce
No cicatrizan
Tienen vasos sanguíneos en la superficie
Presentan una descamación continua
Presentan una costra que no se cae o que cae y reaparece
Tienen aspecto de verruga gruesa o cuerno
Crecen rápidamente
También es importante tener en cuenta la aparición de lesiones que parecen lunares pero que son diferentes al resto en cuanto a tamaño, forma y color, o si se presentan los anteriores cambios en lunares que previamente existan en la piel.
Revisar la piel con regularidad, estar atento a los cambios que puedan presentarse no solamente en el propio cuerpo sino en el de nuestros seres queridos, y posteriormente consultar si notamos alguna señal de alarma, es la clave para poder detectar y tratar a tiempo el cáncer de piel, lo cual finalmente se traduce en excelentes resultados oncológicos, funcionales y estéticos.
¡Vale la pena mirar con sospecha lo que se ve diferente en la piel!